La comida es una de esas cosas que se echan de menos cuando se está fuera.
En todos las páginas web de migrantes (sean españoles o no) hay invariablemente una sección dedicada a la comida. En todos los grupos de facebook hay preguntas sobre recetas o sobre dónde conseguir ingredientes.
No te descubriré el mundo si te digo que una de las razones por las que añoramos ciertos alimentos es porque estamos acostumbrados a su (buen) sabor. O por nuestras preferencias personales.
Pero, ¿te has preguntado alguna vez qué significa para ti la comida? ¿Crees que solo es un nutriente con mejor o peor sabor? Nada más lejos de la realidad. La comida está cargada de significado. Aprendemos a clasificarla, a pensarla.
Empecemos con el orden más básico: hay comida buena y mala. Sana y poco sana. Hay alimentos para la mañana, la tarde, la noche. Para el verano, el invierno. Para chicas, para chicos. Para infantes y adultos. Para obrearas, obreros y burgueses y burguesas.
Además de deleitarnos con la comida, la utilizamos para un sinfín de cosas más. Como por ejemplo, para definirnos como personas: para señalar nuestras creencias religiosas, éticas; nuestra clase social... y hasta nuestros orígenes*
Y entorno a la comida se sellan alianzas matrimoniales, acuerdos comerciales o amistades.
La comida es mucho más que un mero nutriente. Así pues, cuando añoras la comida de tu casa, a la nostalgia del sabor se le suman un montón de ingredientes secretos: la nostalgia de las personas, de la fiesta y la atmósfera que acompañan la velada, y los trocitos de ti que te has ido dejando cuando has dejado de comer ese ibérico de bellota.
Si quieres trabajar sobre este tema, puedes acudir a la sección de ejercicios
He anotado algunas de las páginas que envían productos españoles al extranjero.
*A modo de ilustración:
Observa cómo se define el personaje Juan El Flamenco de Andrés Berlanga en su corto.
O en 8 Apellidos vascos decían:”Pero este igual como es Clemente se pide paella o algo”
O el famoso anuncio de Hazte Extranjero, que venía a decir que para seguir siendo españoles tenemos que seguir comiendo embutidos de la tierra.